Los *Azzurri* viven un momento crítico tras la dura derrota por 6-2 ante el PSV Eindhoven, resultado que expuso las graves falencias defensivas del equipo y dejó tocada la moral del vestuario. Antonio Conte enfrenta ahora el desafío de reactivar la confianza y cohesión del plantel napolitano, que, pese a sus recientes tropiezos, conserva un registro imponente en casa. El Estadio Diego Armando Maradona sigue siendo su gran fortaleza: el Napoli permanece invicto allí en quince partidos consecutivos de Serie A desde diciembre pasado, una racha que simboliza su carácter competitivo y representa el pilar sobre el que Conte busca reconstruir las aspiraciones del equipo en una liga italiana cada vez más exigente y equilibrada.
Los *Nerazzurri* atraviesan un momento de forma sobresaliente, encadenando siete victorias consecutivas que los consolidan como el equipo más dominante del fútbol italiano actual. Bajo la dirección de Cristian Chivu, el conjunto milanés ha experimentado una notable transformación basada en un estilo de juego ofensivo, dinámico y contundente, capaz de desbordar a cualquier rival con una superioridad abrumadora. En sus últimos siete compromisos de liga, han firmado dieciocho goles repartidos entre nueve futbolistas distintos, una muestra clara de su diversidad y poder colectivo en ataque. Esta versatilidad ofensiva, combinada con la confianza y solidez táctica impuestas por su entrenador, convierte al Inter en una auténtica máquina competitiva que hoy luce prácticamente imparable en el panorama futbolístico italiano.
